Traductor

Presentación

Durante el período del régimen militar en Chile (1973-1990) se violaron sistemáticamente los derechos humanos, por medio de torturas, desapariciones, violaciones, asesinatos y escenas macabras.

Naomi Klein, autora del libro La Doctrina del Shock, explica cómo se pretendió instalar el sistema económico neoliberal –un sistema que no sería fácilmente aceptado por la población, por sus características- por medio del shock. Explica que esta doctrina fue utilizada por primera vez de forma masiva en Chile durante la dictadura militar de Augusto Pinochet.

Por otro lado, Michel Focault explica cómo la práctica gubernamental desde el soberano hacia los súbditos, está mediada por la violencia hacia los cuerpos, como una forma de mantener el control por parte del Estado hacia la Sociedad Civil, lo que se ha convertido en un verdadero arte de gobernar.

Marcia Alejandra Merino, más conocida como La flaca Alejandra, tras las sesiones de tortura se convierte en una de las principales informantes, entregando a militantes tan importantes para el MIR. Años más tarde entregará su testimonio acerca de lo vivido, por medio del libro “Mi verdad: más allá del horror, yo acuso”

martes, 4 de diciembre de 2012

Marcia Alejandra Merino: "Mi verdad: más allá del horror, yo acuso"



"Nací en el mes de octubre de 1948 en Concepción. Era la menor de tres hermanos. Mi padre murió cuando yo tenía cuatro años. Fui testigo de sus últimos minutos de vida y su expresión de agonía, quedó para siempre grabadas en mis recuerdos (...)". Así comienza el relato testimonial de Marcia Alejandra Merino, más conocida como Flaca Alejandra ex militante del MIR (Movimiento de Izquierda Revolucionaria) y colaboradora de la DINA (Dirección Nacional de Inteligencia) durante la Dictadura militar  de Augusto Pinochet, autora del libro "Mi verdad: más allá del horror, yo acuso".


La Flaca Alejandra narra sus recuerdos en un testimonio que no dejó de ser polémico durante los años 90. Este texto constituye una fuente valiosa en cuanto a la comprensión de la biopolítica, puesto que  narra el tránsito de su vida como militante revolucionaria a una informante de la Dina. El texto está dividido en 5 capítulos ordenados temporalmente desde su detención en 1974 hasta los momentos previos a la publicación del texto en 1993.


Su relato es de tono frío y angustiante, delata nombres como quien hace una cuenta ordinaria:

"Desde el 1º de agosto de 1974 hasta fines de mayo de 1975, fecha en que salí de los centros clandestinos de detención, tortura, muerte y desaparecimiento, dí también los nombres de Muriel Dockendorf y Francisco Aedo, hasta ahora desaparecidos. Además entregué  el domicilio de Adriana Urrutia, Sara Astica, Liliana Maldonado, Zaida Cataldo y Gloria Laso, todas ellas sobrevivieron a la detención y tortura."
Como militante del MIR, cumplió labores logísticas, como la búsqueda de casas de seguridad y también estuvo a cargo de la reorganización del partido en Talca tras el golpe de estado. Por lo tanto, tenía un amplio conocimiento de direcciones y nombres de personas, razón por la cual es detenida y cooptada por el organismo de inteligencia, que tenía el objetivo de "limpiar" el país, tal como se indica el conocido Informe Rettig.

Tras su segunda detención en Curicó es trasladada al Cuartel Yucatán ubicado en la calle Londres #38, en Santiago, hoy actual espacio de memoria. Este lugar es considerado, junto a la casa de José Domingo Cañas, como uno de los centros más duros en la represión política, donde hubo 96 ejecutados/as o desaparecidos/as y más de 200 detenidos/as, 83 hombres y 13 mujeres, 2 de ellas embarazadas.

Alejandra, describe esta casa con palabras que delatan el horror vivido en ese espacio:
"Apenas llegué a ese lugar, que después supe era Londres 38", me invadió un terror indescriptible, pues el ambiente era el infierno. Escuchaba gritos de personas torturadas, voces de mando, insultos, golpes... A la mañana siguiente, lo sé porque escuché órdenes de levantarse a muchas personas, me tomaron de la mano y me llevaron a un segundo piso (...)"
La escalera por la que sube Alejandra, es descrita por otros prisioneros como una escalera de Caracol, y lleva a las salas de interrogatorios y torturas. Es precisamente una de estas salas, donde esta mujer inicia un viaje de no retorno, que ella misma describe como muerte o muerte "En toda esa época, mi dilema fue elegir entre la muerte y la muerte...".

Durante su estadía en este centro de detención cuenta cómo fue torturada y cómo establece contacto con Osvaldo Romo y Krasnoff (actualmente cumpliendo condena por violaciones a los derechos humanos). En cuanto a este último, narra su apreciación a este personaje, donde se deja entrever el método de coerción ejercido hacia ella, método que finalmente logra el triunfo del torturador:

"Cuando me devolvieron a José Domingo Cañas le dije a " Krasnoff que había advertido a las demás detenidas que no hablaran nada delante mío. Contrariamente a lo que yo esperaba, no me torturaron ni castigaron físicamente. Creo que Krasnoff inició una nueva estrategia para interrogarme y mantenerme doblegada: largas sesiones en que me hablaba del rol de las Fuerzas Armadas en ese período, justificando lo que hacían. Paralelamente me llevaban a un sector contiguo en su oficina, y por orden suya, me obligaban a escribir sobre mí, sobre mi infancia, de por qué había ingresado al MIR, qué pensaba de las Fuerzas Armadas en ese momento, etc. Lo hice."

 En los capítulos finales se dedica a describir la estructura orgánica de la DINA, su participación como agente y sus días como mujer culpada y perseguida tanto por la DINA, por el MIR y toda la izquierda chilena. A lo largo de su testimonio se va evidenciando como la biopolítica, es decir, la subyugación de los cuerpos para doblegar la voluntad y así generar gobierno, fue utilizada como principal arma para instalar el neoliberalismo en Chile, es decir, cómo las torturas, las traiciones y el terrorismo de estado, se instala en un país que aspiraba a grandes cambios revolucionarios, tal como lo dice el grupo encargado de la visita guiada de Londres 38 "La dictadura fue una derrota militar, no política, aunque eso es lo que nos quieren hacer creer con las ideas de que el pueblo no quería la Unidad Popular"... Efectivamente el pueblo fue aterrado, horrorizado y doblegado por el terrorismo de Estado, o como lo explica Naomí Klein, gracias a La Doctrina del Shock".

8 comentarios:

  1. hola, escribo para saber si la autora de este blog pudiese ayudarme en la búsqueda del libro "Mi verdad: más allá del horror, yo acuso", con mis compañeras vamos a trabajar testimonio e insilio en dictadura y creemos que este libro es un buen material, pero se nos a complicado mucho dar con él, me gustaría saber si tienes el libro en la versión pdf o cualquier dato que nos ayuda a dar con el paradero de este título, de ante mano gracias
    te dejo mi e-mail, niest@live.cl
    Nicole S.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. https://es.scribd.com/document/542183053/Marcia-Merino-Flaca-Alejandra-Mi-Verdad-Mas-Alla-Del-Horror-Yo-Acuso-Testimonio

      Eliminar
  2. Estimados. Igualmente me interesa el libro. Dejo mi correo montesbeatriz34@gmail.com

    ResponderEliminar
  3. ¿saben algo del libro? dagojesus@gmail.com

    ResponderEliminar
  4. Deseo el libro si alguien lo tiene en digtal se lo agradecere de por vida

    Ediv_21-03-88@hotmail.com

    ResponderEliminar
  5. No se puede negar que el gobierno militar tuvo funcionarios tanto civiles como militares que demostraron todos sus instintos criminales y horribles con el pretexto de servir al país. Estos asesinos incrustados en las distintas ramas de la defensa, desprestigiaron y desvirtuaron los principios y buenas intenciones del golpe de Estado,oobligando a Pinochet a transformarse en un protector de esos desalmados y de paso quedar él como el tirano que recordará la historia

    ResponderEliminar
  6. Donde se puede adquirir el libro?

    ResponderEliminar